El síndico Roberto Salcedo, y el Secretario de Salud, Bautista Rojas, explicaron que en lo adelante toda persona que venda alimentos en lugares públicos antes de ser instalado debe tener como requisito el permiso sanitario de rigor y cumplir con todos los requisitos que se requieren para instalarse.
Destacaron que toda persona que en lo delante vaya a vender alimentos en puntos fijos o ambulantes deberá someterse a análisis clínicos para determinar si tiene alguna enfermedad y como garantía de que está apto para manipular los productos que comercializan.
Salcedo dijo que se lleva a cabo un levantamiento de los vendedores ambulantes que ocupan espacios públicos en el Distrito Nacional y que hasta el momento han registrado unos dos mil 500 vendedores, pero que la relación aumenta con el paso de los días.
Señaló que ya se iniciaron reuniones para ir orientándolos sobre la situación y advirtió que todo aquel que no cumpla con los requisitos no podrá ocupar espacios en la vía pública, los cuales van a ser sometidos a una organización de manera que varias personas no vendan un mismo producto en un mismo lugar.
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