¿Sabían ustedes que la historia tras el nombre del “burrito” mexicano no tiene nada que ver necesariamente con su forma? Hacia los años de la revolución mexicana, de la cual se conmemora este 2010 su primer centenario, un vendedor ambulante, Juan Méndez, tuvo la idea de hacer tortillas para llevar con harina de trigo, en lugar del tradicional maíz, enrollándolas dentro de mantelitos para mantenerlas calientes.
Tantos eran los pedidos que recibía que tuvo que adquirir un burro para transportar la comida. Pronto empezaron a preguntar por la comida del “burrito”, y ahí se le quedó la denominación. La anécdota la hace Yris Rodríguez, del restaurante “Algo Mexicano”, y es un punto de partida para reseñar una gastronomía que nos es muy familiar.
Predilección
En efecto, la preferencia del público dominicano por la comida mexicana es imposible de ocultar: nos encanta y es una de las gastronomías preferidas para ocasiones especiales que impliquen un grupo de personas y haya que preparar algo sencillo, rápido y sabroso. No en vano los restaurantes de comida mexicana tienen su clientela.
Ahora bien, como señala Rodríguez, la variedad más popular entre los dominicanos es la llamada “tex mex”, una más “americanizada” (esto es, del área norte de la nación azteca y con una marcada influencia estadounidense), con platos creados en la frontera México- EE.UU. como las flautas, las fajitas y los nachos.
Dentro de esa misma línea, quienes ya son más fanáticos de una comida más típica, que incluya los mundialmente famosos “tacos al pastor”, mole, sopes y platos más hacia el sur, suele ser un público más conocedor.
“Generalmente es gente que ya ha estado en México y probó su comida y se enamoró”, dice. Aquí es precisamente donde viene la integración criolla, que Rodríguez presentó en el Centro León durante su fiesta de séptimo aniversario y dentro de las tertulias “Comer como un dominicano”.
CREATIVIDAD PARA ENRIQUECERLOS
En el caso de los nachos, estos trozos triangulares de tortilla que son cubiertos de queso, y que en la versión criolla se les ha agregado carne molida, pico de gallo (preparado también “a la dominicana” con una serie de ingredientes adicionales) y otros elementos.
Es que, igual que en otros aspectos de nuestro diario vivir, los dominicanos “hemos puesto a volar nuestra imaginación” y, al momento de comer o preparar alguna receta extranjera –mexicana, en este caso- le integra uno que otro elemento adicional, “cualquier cosa que le venga a la cabeza”, agrega esta conocedora.
¿Los burritos? Desde pierna ahumada, cangrejo, camarones y carnes de todo tipo hasta repollo, ajíes y aderezos como ¡cátchup y mayonesa! Pero, agrega Rodríguez, si de cierta forma hacemos un ejercicio de “pensar fuera del cajón” y nos remontamos a la historia de su creación, se llega a la línea de una gran tortilla envolviendo una comida para que no se enfríe.
0 comentarios:
Publicar un comentario