En medio de denuncias sobre un alegado aumento de la criminalidad y los homicidios en la ciudad de Santiago, el presidente Leonel Fernández relevó ayer al comandante policial de esa plaza, general Juan Ramón de la Cruz Martínez, y en su lugar designó al general Francisco Romer López.
De la Cruz Martínez fue enviado a la Dirección Sur Central, con asiento en la ciudad de Baní, mediante el decreto 541-11, que también contiene la designación del nuevo comandante de Santiago.
El general Romer López es un experimentado oficial de carrera que ha ocupado distintas posiciones en áreas investigativas, inteligencia y alta seguridad dentro de la Policía Nacional. Se destacó como director de la Policía Escolar y como oficial superior de la seguridad del Presidente de la República.
Graduado en la Academia Policial, ha realizado distintos cursos y entrenamiento de alta gerencia, comando policial, mandos, casos complejos e investigación social y criminal.
El decreto presidencial, dado a conocer ayer por la Dirección de Prensa de la Presidencia de la República, dispone otros cambios de la Policía, como la designación del general Andrés Gerónimo Sanz Jiminián, director Regional de Santo Domingo Oeste, con asiento en Los Alcarrizos.
Esta semana se desbordaron los límites de la preocupación por los casos de violencia en Santiago, luego de que se conociera la ejecución de tres colombianos y un venezolano, cuyos cadáveres fueron encontrados el pasado sábado en una casa desocupada de la calle José Herrera D, del exclusivo sec tor Cerros de Gurabo III, lo cual fue vinculado de inmediato por las autoridades al narcotráfico. El cuádruple asesinato tuvo tanta repercusión en el país, que el jefe de la Policía, mayor general José Polanco Gómez asumió directamente las investigaciones del caso.
También el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez consideró escandaloso lo que está ocurriendo en Santiago, al declarar que hay un enclave muy fuerte del narcotráfico en esa ciudad del Cibao, donde se determinó que de 108 personas que han muerto de manera violenta en lo que va del año, 24 fueron víctimas del sicariato.
Igual preocupación externó el arzobispo de Santiago, Ramón Benito de la Rosa y Carpio, por la situación que se registra en esa ciudad, así como los diversos sectores sociales, políticos y económicos de la región.
Estadísticas En cambio el jefe de la Dirección Cibao Central de la Policía, general De la Cruz Martínez, respondió en la ocasión que el hecho de que las estadísticas revelan que en lo que va del año en Santiago, han ocurrido 108 muertes violentas, colocan a esta ciudad muy por debajo del índice de criminalidad del país, que es de 23.44 por ciento.
“Es una exageración hablar de una ciudad insegura cuando 108 muertes violentas, como se ha señalado, promedia una tasa de criminalidad de 13.5%, cuando la media en el país ronda el 23%, escenario que refleja una bajísima tasa de criminalidad”, indicó el general De la Cruz Martínez.
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