El síndico Roberto Salcedo entregó hoy la Llave de la Ciudad de Santo Domingo al presidente de Panamá, Martín Torrijos Espino, quien a su vez lo condecoró con la Orden General Omar Torrijos Herrera en el grado de “Encomienda de Plata”. Por otro lado el presidente Torrijos llegó al Palacio Nacional a las 11:00, y fue recibido por el canciller Carlos Morales Troncoso y el jefe de Protocolo de la mansión presidencial, Roberto Blandino, quienes lo introdujeron al despacho del presidente Leonel Fernández.
El presidente Fernández colocó la condecoración de Duarte, Sánchez y Mella, al presidente Torrijo en el grado Gran Cruz placa de Oro.
A la llegada del gobernante panameño, se produjo una confusión de la avanzada de Torrijos, cuyos miembros se desviaron por la calle Dr. Báez, donde está la Dirección Nacional de Investigaciones (DNI), por lo que tuvieron que retornar para ingresar a la puerta principal.
La condecoración del gobierno panameño al síndico del Distrito Nacional le fue impuesta por el presidente Martín Torrijos en el Palacio Consistorial de la calle El Conde esquina Arzobispo Meriño.
Al acto asistieron Samuel Lewis Navarro, primer vicepresidente y Ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, la Cónsul de esa nación en el país, Miroslava Rosas, el presidente del Ayuntamiento, Winni Terrero, el secretario general de la corporación edilicia, Domingo Contreras, el secretario técnico, Andrés Navarro, entre otros.
El presidente panameño recibió la Llave de la Ciudad, así como los planos y una réplica de la estatua que se colocará en la plaza que construirá el Ayuntamiento en honor a su padre, general Omar Torrijos Herrera, en el Malecón.
Tanto el mandatario de Panamá como el síndico Salcedo, ratificaron los lazos de amistad y abogaron por su fortalecimiento.
El presidente Torrijos abogó porque los funcionarios aporten a los soluciones de los males que afectan a la población.
Dijo que viene a República Dominicana de cuando en cuando y ha observado que los anhelos y necesidades son los mismos, “y los ciudadanos esperan de nosotros sensibilidad y deseo de ser parte, no espectadores del desarrollo”.
Indicó que los ciudadanos necesitan romper las cadenas que los atan a la marginalidad y que se abran las ventanas de las oportunidades sociales con voluntad y decisión.
Abogó porque se concreticen ideas y se realicen alianzas sociales que pongan fin a la pobreza que afecta a la población.
El síndico Salcedo agradeció en nombre de la ciudad de Santo Domingo y su familia, la condecoración concedida por el presidente Torrijos.
Externó regocijo por entregar la Llave de la Ciudad a un presidente joven “que por demás ha asumido desafíos supremos que le ha impuesto su patria, y que deja un legado fundamental a su país y al Continente, de que se puede ejercer el poder y ser ejemplo de decencia y anegación.
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