Santo Domingo.- Legisladores de diferentes partidos manifestaron ayer su oposición a que el país reciba la visita del presidente electo de Honduras, Porfirio Lobo, prevista para este jueves, mientras que un importante funcionario del Palacio Nacional confirmó que el presidente Leonel Fernández lo recibirá mañana.
Los senadores Luis René Canaán, Adriano Sánchez Roa y Euclides Sánchez, así como el presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín, alegan que con esa visita se estaría legitimando el golpe de Estado contra Manuel Zelaya, lo que sería un mal precedente para las demás naciones, incluyendo a República Dominicana.
Valentín, presidente de la Cámara de Diputados, dijo que si él fuera el mandatario no recibiría a Lobo.
Sin embargo, consideró que el presidente Leonel Fernández está en su derecho de recibir a Lobo, ya que ha demostrado ser un líder regional.
Mientras la Alianza Por la Democracia (APD), a través de su secretario general, Carlos Sánchez, consideró que antes de recibir a Lobo se debe esperar la decisión que tome la Organización de Estados Unidos (OEA), la cual está apoderada del golpe de Estado contra Zelaya.
Sánchez apuntó que se debe mantener la coherencia de lo que estuvimos diciendo cuando se produjo el golpe, que fue la condena al hecho y la exigencia de la reposición de Zelaya.
Argumentó que “si recibimos a Lobo estaríamos legitimando el golpe de Estado”. Recordó que cuando ocurrió el golpe de Estado en la República Dominicana, en 1963, el país recibió la solidaridad de todos los pueblos, incluyendo Honduras.
Sánchez consideró que “no podemos aventurarnos a ser el primer país que legitima el gobierno de Porfirio Lobo”. Lobo, candidato conservador del Partido Nacional, ganó las elecciones de finales de noviembre pasado con el 55,4 por ciento de los votos contra el 39 por ciento de Elvin Santos, del oficialista Partido Liberal.
Zelaya fue electo presidente de Honduras tras ganar las elecciones de 2005 por el Partido Liberal. Asumió el 27 de enero de 2006, pero su período, que vencía el 27 de enero de 2010, fue interrumpido por un golpe de Estado el 28 de junio de este año. El Parlamento de su país juramentó como nuevo presidente al veterano legislador y empresario del transporte Roberto Micheleti.
Según sus opositores, la destitución de Zelaya se produjo por órdenes de la Suprema Corte de Justicia de Honduras, debido a la supuesta comisión de delitos graves, como traición a la patria y otros.
Palacio
Un alto funcionario del Palacio Nacional confirmó ayer que el presidente Leonel Fernández recibirá este jueves en su despacho al presidente electo de Honduras, Porfirio Lobo, quien a partir de enero pasará a ocupar el puesto que hasta esa fecha le corresponde al derrocado presidente de esa nación Manuel Zelaya.El funcionario, quien pidió reserva de su nombre, dijo que el jefe del Estado está en la disposición de recibir a Lobo, a pesar de la posición en contra que mantuvo y mantiene en torno al golpe de Estado de que fue objeto Manuel Zelaya.
“No hay razones para el Presidente no reciba al presidente electo de Honduras, porque una cosa es la posición que ha mantenido el jefe de Estado dominicano en torno al golpe en esa nación y la otra es que Lobo resultó electo de unas elecciones a las que gran parte del pueblo acudió a votar”, precisó el funcionario.
De acuerdo con las informaciones, el presidente electo de Honduras llegará al país hoy y mañana será recibido por el presidente Fernández en su despacho del Palacio Nacional.
Desde el inicio del conflicto por el golpe de Estado en Honduras, el presidente Leonel Fernández mantuvo la posición de que la acción constituyó un retroceso y atropello al sistema democrático instaurado en esa nación y en la región en sentido general. Llegó a proponer un bloqueo para presionar a los golpistas a devolver el poder a Zelaya.
INTENTOS POR ROMPER CERCO INTERNACIONALGESTIONES POR SU PRESIDENCIA
Tras ganar las elecciones y lograr unir en torno a su persona a fuerzas políticas, sociales y económicas de Honduras, Porfirio Lobo ha iniciado acciones con la finalidad de romper el cerco diplomático que se formó contra esa nación tras los acontecimientos del pasado 28 de junio cuando Zelaya fue sacado en pijama de su residencia y montado en un avión para luego deportarlo hacia Costa Rica.
Hay quienes sostienen que la tarea más difícil de Lobo será ganarse la simpatía de los gobiernos con tendencia izquierdista de la región, que todavía no digieren la derrota que significó para ellos que Manuel Zelaya fuera sacado de la presidencia de la República y que el pueblo hondureño acudiera a votar en las elecciones celebradas hace dos semanas.
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