Las alfombras aportan calidez, color y frescura a los espacios, (sala, habitación, pasillos e inlcuso, el baño), brindando la posibilidad de renovar cualquier ambiente de manera rápida y muy sencilla. Con una alfombra puedes terminar de definir el estilo de tu hogar y aportar un toque acogedor. Las hay antiguas, clásicas y contemporáneas, pero además varían sus materiales, pueden ser de piel, de lana, sintéticas, artesasanales, de algodón o de hilos de seda.
Yuderka Rancier, encargada de Tendance, de la tienda Conforama, resalta la importancia y utilidad de las alfombras en el hogar y la versatilidad que tienen para dar el toque que permite dar mayor vistosidad al inmobiliario, a espacios y ambientes. “Las alfombras se enmarcan en cualquier ambiente, tomando en cuenta múltiples detalles para conseguir la elegancia que se busca. En el hogar u oficina aportan mayor valor estético al mobiliario, resaltando cualquier entorno”, dice la Rancier.
La experta comenta que en el hogar las alfombras constituyen un elemento muy importante en cuanto a artículo decorativo se refiere, y resulta un factor clave a la hora de sectorizar espacios dentro de un mismo ambiente, además de que tienen la naturaleza de brindar esa sensación de intimidad que ayuda a completar la decoración.
Rancier dice que es posible combinar y utilizar más de una alfombra en un mismo lugar pero, como éstas se utilizan para crear y renovar espacios, puede que si colocan dos alfombras en un mismo ambiente dé la sensación de que el cuarto está dividido en dos partes, por lo que hay que tomar este factor en cuenta.
“Si vas a combinar alfombras lo ideal es que éstas queden bien a la vista, ya sea por por su color, material o motivo”, dice Rancier.
Para su conservación
Cuando las alfombras de lana o de pelo animal están sucias, se pueden limpiar a base de un producto en polvo o líquido o una espuma seca, que se vende en el supermercado, siguiendo rigurosamente las instrucciones para su uso. Es conveniente operar en superficies pequeñas, aclarar sin mojar demasiado y secar después con un trapo seco y limpio.
También se puede emplear agua con un poco de amoniaco (una cucharada de este producto por cuatro de agua). Si están muy sucias, lo mejor es confiarlas a un especialista. Algunas aspiradoras están especializadas en la limpieza de las alfombras, porque están provistas de cepillos adecuados para ello y de un depósito para jabón espumoso especial. Las alfombras de algodón y las artesanales son lavables, pero hay que tener mucho cuidado.
Elección, da en el blanco
En cualquier caso la elección de la alfombra es algo muy personal y cada estancia requiere de un modelo, un tamaño y un color diferente, pero siempre existen pautas generales que hay tener en cuenta para no cometer errores.
Por un lado, la calidad para garantizar que adquirimos un artículo duradero, por otro lado hay que tomar en cuenta el tamaño, hay que tomar medidas exactas de la superficie que queremos cubrir con la alfombra antes de ir a comprarla y por último hay que pensar en la limpieza. Debes elegir una fácil de limpiar, ya que las alfombra tienden a acumular mucha suciedad, lo que no es saludable.
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