Pertenecer o no a un sindicato de choferes puede ser la diferencia al momento en que un agente de la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet) se acerca a un conductor alertado por alguna infracción.Porque los choferes del “concho” y guaguas voladoras disfrutan de “cierta inmunidad” frente a la Ley 241, que regula el tránsito terrestre.
Es normal observar en cualquier esquina a los agentes de tránsito deteniendo a conductores de vehículos privados, especialmente en buenas condiciones, sin importar que en la cercanía se encuentren autos mal estacionados, sin luces o choferes que conducen sin cinturones de seguridad.
En más de una ocasión agentes de Amet han confesado a conductores que no pueden multar a los choferes sindicalizados porque existen “acuerdos” interinstitucionales entre el organismo y esos gremios. Leer Mas
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