Sin ni siquiera haberse producido el primer picazo para la segunda línea del Metro, familias residentes en zonas por donde pasarán los trenes pidieron ayer al Gobierno que defina el plan de desalojo que emprenderá para reubicar a los afectados. La principal preocupación de la gente es porque aun no han recibido ofertas de ningún sector oficial para negociar la forma y los términos en que tendrán que ceder los terrenos donde viven, y que después serán declarados de utilidad pública.
Residentes consultados sobre las expectativas que tienen respecto a la segunda versión del Metro de Santo Domingo dijeron que lo que saben de este megaproyecto es gracias a los comentarios que reciben “a través de terceros”.
Victoriana Martínez, quien reside debajo del puente Francisco del Rosario Sánchez (de la 17), por donde se presume pasará el Metro cuando vaya desde San Luis hasta Los Alcarrizos, y viceversa, explica que hasta el momento las autoridades solo han enviado técnicos que han estado haciendo mediciones y excavaciones en algunas calles. Pero nada de desalojo.
“Nada más es ‘radio bemba’ que se oye: que hay desalojos, que hay desalojos. No han venido a orientarnos y no dicen nada. Solamente vienen y miden. Hacen un hoyo allí y hacen otro hoyo allá”, critica Martínez.
Esta señora tiene 20 años viviendo en el área del puente que se levanta sobre el río Ozama, y no esconde su inquietud por saber qué pasará con su familia y otras que tendrán que abandonar el sector donde habitan.
El temor de doña Victoria es compartido por vecinos como Isabel Valera, quien tiene ya 4 años en este lugar, perteneciente al sector Gualey, y dice que no sabe qué harán las autoridades con ella y todos los que enfrentarán esta misma situación.
Estas personas comentan que las aludidas mediciones han tenido lugar entre las calles “B” y “la 17”, que es el trayecto de este sector que recorrerá la segunda línea del Metro.
Reporteros de este diario recorrieron gran parte del trayecto por donde el Metro cruzará la capital de Oeste a Noreste, y viceversa, en un recorrido calculado en 22.5 kilómetros, y todas las personas entrevistadas dijeron que el Gobierno aun no realiza el censo para saber qué cantidad de terreno será declarado de utilidad pública, y cuántas personas serían afectadas o beneficiadas.
Desde San Luis, al este de la capital, en dirección a Los Alcarrizos, ubicado al Oeste, la segunda línea del Metro pasaría por sectores como El Almirante, Villa Hermosa, Hainamosa, Los Trinitarios y Los Mina. Igualmente, avenidas como la San Vicente de Paúl, Carretera Mella Julio de Peña, Josefa Brea, Quinto Centenario, Leopoldo Navarro, John F. Kennedy, Ortega y Gasset, Lope de Vega, Winston Churchill, Kilómetro 9 de la Carretera Duarte.
Declarar terrenos de utilidad pública
Asuntos tales como declarar de utilidad pública los terrenos propiedad privada y que serán utilizados en la construcción de la segunda etapa del Metro de Santo Domingo es una potestad, en primer lugar, de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret).
El Caribe trató ayer de localizar al ingeniero Leonel Carrasco, subdirector de esa entidad oficial, pero en cada intento respondía alguien diciemdo que estaba en reunión.
La revalorización de los terrenos, en especial donde serán construidas las estaciones, que se estima serán 24 en total, es uno de los trabajos que tiene que definir la Opret desde un primer término, debido a las complicaciones que ello provoca.
Ansiedad e incertidumbre
Escuchar informaciones de que pronto comenzarán la segunda etapa del Metro despierta en estos moradores ansiedad e incertidumbre.
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