SANTO DOMINGO.- El presidente Leonel Fernández anunció anoche un aumento salarial de 15% a los empleados públicos que ganan hasta 30 mil pesos mensuales y una rebaja de 5% a los sueldos entre 151 mil hasta 200 mil, y de 10% a los salarios de 200 mil pesos en adelante, como parte del conjunto de medidas que aplicará el gobierno para reajustar las finanzas públicas y enfrentar los efectos de la crisis mundial que provocan las alzas de los precios del petróleo y los alimentos. En un discurso, pronunciado desde su Despacho del Palacio Nacional, el mandatario anunció, asimismo, un reajuste en el salario mínimo del sector público, incluyendo las pensiones y jubilaciones de civiles y militares, que pasarán de 3 mil a 5 mil pesos mensuales. Los demás incrementos salariales se establecerán a partir de la misma fecha.
Entre las medidas, se incluye la focalización del subsidio del Gas Licuado del Petróleo (GLP), para que en lo adelante sólo beneficiará a 24 mil choferes de carros públicos y a 800 mil hogares pobres, a través de un nuevo programa denominado “Bonogas”. La focalización de este subsidio representará un ahorro durante el resto del año de 6 mil 300 millones de pesos.
En lo relativo al sector eléctrico, el gobernante explicó que el subsidio para el año 2007 fue de 21 mil millones de pesos, y que para este año se proyecta sobre 36 mil millones. Para enfrentar la situación, Fernández anunció medidas para disminuir el costo de generación de energía, establecer sectores de gestión de cobro y facturación, la focalización del subsidio del Programa de Reducción de Apagones (PRA) y la sustitución de 10 millones de bombillas incandescentes por bombillas de bajo consumo.
Otras medidas
En cuanto al gasto público, Fernández anunció una reducción de un 20% para el periodo agosto-diciembre de este año, equivalente a cerca de 20 mil millones de pesos, y no iniciar la construcción de nuevos proyectos de infraestructuras y priorizar la ejecución de aquellas que a la fecha tengan por lo menos un 75% de realización”.
Asimismo, anunció una rebaja de la publicidad del Gobierno de 25%, la congelación de la compra de equipos de oficinas y vehículos de todo tipo por un año, con excepción de la Policía y secretarías de Agricultura y Salud Pública, y una disminución de la compra de combustible en un 25%, así como de gastos en celulares, pasajes, viáticos, dietas y representación. Se congelará la nómina pública, exceptuando escuelas y hospitales.
Fernández se comprometió a intensificar la producción de bioetanol y biocombustibles en el transporte y a establecer un impuesto único para la importación de vehículos de transporte de pasajeros, y se exonerará del pago de los impuestos arancelarios, ITBIS y los demás derechos y cargas (tasa cero), a las importaciones de lubricantes, neumáticos, piezas y repuestos para vehículos públicos que sean importados directamente por los beneficiarios.
Sobre la agropecuaria, dijo que serán incorporadas a la producción en el corto plazo 500 mil tareas estatales, mediante contratos de arrendamiento, cuya producción contribuya a satisfacer la demanda de la población y de insumos para la alimentación animal, así como intensificar el proceso de titulación de tierras, especialmente las de reforma agraria, y el desarrollo de cooperativas o asociaciones de los pequeños y medianos productores para que puedan acceder a financiamiento y tecnología.
Se incrementará la incorporación de valor agregado a la producción primaria, fomentando el desarrollo de las agroindustrias y se completará la construcción del Merca Santo Domingo para que su puesta en operación fortalezca el sistema de comercialización de productos alimenticios en el país.
ADVERTENCIA
Fernández afirmó que la actual crisis debe obligar a los dominicanos a ser sobrios en el gasto; a ser más comedidos y moderados. “A no despilfarrar. A no derrochar. A apreciar el valor e importancia de cada cosa; y a no sucumbir ante las tentaciones de la vanidad que permanentemente nos incitan a consumir lo que no necesitamos”.
Explicó que ante el desafío externo de nuestra economía, el Banco Central ha adoptado, desde principios de año, un conjunto de medidas de política monetaria orientadas a evitar que el crecimiento de la demanda agregada presione aun más los precios internos.
Estas medidas, citó el ajuste de las tasas de interés, el uso de las reservas internacionales y el cambio en la composición del encaje legal, han contribuido a reducir el ritmo de crecimiento de los agregados monetarios.
“Estas decisiones son similares a las aplicadas por los países no productores de petróleo alrededor del mundo, principalmente en América Latina, como lo prueban los casos de Perú y Chile, para sólo citar dos ejemplos”.
Señaló que como aún no se vislumbra un cambio a corto plazo en las tendencias de los precios de las materias primas, incluyendo el petróleo, el gobierno decidió tomar el conjunto de medidas anunciadas.
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