viernes, 29 de mayo de 2009

Roban recién nacido de maternidad La Altagracia

EN UNA SALA CON OCHO PACIENTES Y UNA ENFERMERA NADIE VIO EL HURTO
Alexandra Valdez apenas consiguió reportar el rapto de su hijo porque el llanto le ahogaba las palabras.
En la sala 401 de la maternidad La Altagracia, ninguna de las ocho parturientas vieron cuando se llevaron el niño.

Santo Domingo.- Ayer, a las 11:30 de la mañana, recién parida, Alexandra Valdez entró al baño de la habitación 401 de la maternidad Nuestra Señora de La Altagracia. Cuando salió, su hijo de dos días de nacido no estaba en la cama. “Una mujer se lo robó”.

La misma mujer que la había ayudado a organizar la ropa el día de parto, y le peinó el pelo, y la llevó de la mano a bañarse, cargó con su pequeño y la dejó llorando, tanto que las palabras le salían mojadas.

“Ella me estaba ayudando. Yo dejé a mi bebé acostado y cuando volví no estaba ahí, yo lo dejé acostado”, decía con dificultad la madre, mientras las otras ocho parturientas de la habitación abrazaban a sus pequeños y aseguraban que no vieron cuando la desconocida tomó al cuarto hijo de Valdez.

La enfermera encargada de la sala de ginecología del centro médico tampoco se percató del hurto, porque no estaba allí al momento de ocurrir el hecho.

La madre explicó que la “mujer” se presentó a su cama y comenzó a mostrarse afectiva, la ayudó de distintas formas. La relación dio a entender a las demás internas que ambas eran familia, por eso nadie vio sospechosa a la desconocida vestida con pantalón negro y camiseta blanca, cuyo único accesorio era un bolso “grande”, negro.

“Ella había dado un par de vueltas por la habitación. Me preguntó por mi hija pero después se fue para la cama de ella (Alexandra), que estaba sola”, dijo una mujer.

El equipo de seguridad del centro médico no se dio cuenta del hurto hasta el mediodía, cuando los gritos de Alexandra se expandieron por todos los pasillos del cuarto nivel. La mujer descrita por la víctima y sus compañeras nunca fue vista saliendo del edificio cargando a un niño. Algunos pacientes creen que el niño fue escondido en el bolso de la ladrona.

En las salas de la maternidad no hay cámaras de seguridad y las madres que son dadas de alta tienen que presentar en la puerta principal, junto al recien nacido, un certificado de natalidad y el recibo de pago por servicios. Los visitantes no se registran al momento de la entrada.

LA MATERNIDAD INICIÓ LA INVESTIGACIÓN

EL DIRECTOR: El director general de la Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia, doctor Juan Cid Troncoso, ordenó el cierre del centro médico inmediatamente se enteró del robo del niño, pero la medida no dio con la sospechosa.

El caso fue reportado a la Policía y posteriormente asumido por el Departamento de Niños, Niñas y Adolescentes de la Fiscalía del Distrito.

Las autoridades investigan el rapto que también podría ser una venta de infante, como ocurre con frecuencia.

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